El Puig celebró este fin de semana la tradicional corrida de caballos especialmente preparados para correr por la arena, las ‘joies’, conocida así porque tiempo atrás a los ganadores se les premiaba con joyas.
Fueron seis las carreras, en función del tipo de animal -híbrido, árabe, español- de unos 1.500 metros. La carrera final se disputó entre los ganadores de las diferentes categorías. El ganador absoluto fue un caballo árabe, Adalí y su jinete Chema.
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