Todo está preparado en Nueva York para uno de los acontecimientos deportivos con más eco del año. El caballo de tres años Big Brown puede ganar esta madrugada (00.30 horas española) la Triple Corona, el título más prestigioso del mundo de las carreras de caballos y que desde hace 30 años no logra ningún purasangre. El vencedor del Derby de Kentucky y del Preakness, las dos primeras etapas del trofeo, se ha convertido en el ídolo de los aficionados y ya lleva ganados tres millones de dólares en premios.
Big Brown, propiedad de un transportista de Brooklyn, no lo tendrá fácil en los 2.400 metros de Belmont Park. Su insultante superioridad en las carreras anteriores y la rápida recuperación de una fisura en uno de sus cascos no garantizan su triunfo en el complicado hipódromo neoyorquino. Nueve rivales intentarán que el potro montado por el jinete americano Kent Desormeaux no encadene su sexta victoria consecutiva y logre el ansiado título. Tendrá enfrente por primera vez a Casino Drive, un caballo japonés invicto en sus cinco salidas y que, con el peruano Edgar Prado a sus lomos, se perfila como su máximo contrincante.
SOLO 11 PRECEDENTES
Cada año la afición hípica sueña con un crack planetario que se lleve la Triple Corona. Para ello debe ganar tres duras carreras en un mes. Primero el Derby de Kentucky, luego el Preakness Stakes y por último el Belmont Stakes, con un total de cuatro millones de dólares en juego. En 138 años de historia solo 11 caballos han conseguido las tres triunfos, el último Affirmed en 1978. Y en estos últimos 30 años 10 caballos han acabado estrellándose en Belmont en su intento de alcanzarlo. Ahora, más que nunca, Big Brown está a punto de lograr esta hazaña.
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